Un juzgado de Madrid actúa por primera vez en favor del hipotecado por determinadas condiciones incluidas en su préstamo que consideró «abusivas»

Solo es un primer paso, que llega desde un juzgado de primera instancia, pero el fallo dictado por su juez supone un paso determinante en la lucha de muchos hipotecados por las condiciones que les han impuesto en sus préstamos inmobiliarios. En concreto, el juzgado 101 bis de Madrid ha actuado por primera vez en el conflicto de las ‘cláuslas abusivas’ declarando nulas algunas de las que más problemas están generando ahora a la banca: la que permite la ejecución de la vivienda por no cumplir algún precepto del contrato -por mínimo que sea-, la relacionada con los intereses de demora por impago y la de los gastos iniciales del crédito.

En lo relativo a la ejecución hipotecaria de la que se vale el banco para iniciar la liquidación de la hipoteca, el juzgado ha declarado la nulidad de la conocida como ‘cláusula de vencimiento anticipado’, en virtud de la cual la entidad podía dar por vencido el contrato de préstamo hipotecario suscrito ante cualquier tipo de incumplimiento de los prestatarios, por ínfimo o esencial que fuera el incumplimiento.

En la misma línea, también ha declarado la nulidad relativa a los intereses de demora -los que se abonan cuando se registra el impago de una cuota- al considerar que eran abusivos, pues contemplaban un interés de demora superior en cuatro puntos porcentuales al interés remuneratorio. Esta declaración de nulidad se ha efectuado teniendo en cuenta no sólo parámetros legales –como el previsto en el artículo 114 de la Ley Hipotecaria-, sino también jurisprudencia consolidada del Tribunal Supremo y del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea.

De hecho, el alto tribunal español había planteado al de Luxemburgo en febrero dos cuestiones prejudiciales en relación con la interpretación de la normativa comunitaria en materia de cláusulas de vencimiento anticipado de los contratos hipotecarios. La consulta llegaba un mes después de que el TJUE contradijera la doctrina del Supremo en lo relativo a la retroactividad total de las devoluciones de las cláusulas suelos cobradas de más por los bancos.

Además, y en relación a la cláusula que imponía los gastos de hipoteca a cargo de los prestatarios, ha declarado nulas las que obligaban a los prestatarios a hacerse cargo de los aranceles de notario y registro. En la sentencia, el juzgado argumenta que es la entidad demandada (Bankia) quien está obligada al pago de los mismos pues es quien ostenta un interés en la constitución de la garantía real de la hipoteca, mientras que el prestatario únicamente está interesado en la obtención de un préstamo.

La constitución de garantía real -señala la resolución que se acompaña íntegra en archivo adjunto-, sólo beneficia a la entidad bancaria, pues es ella la que obtiene un título ejecutivo para acudir al procedimiento de ejecución especial y un crédito preferente en caso de que los prestatarios incurran en concurso de acreedores, ya que el crédito garantizado con hipoteca ostenta un privilegio especial para su cobro al ser ejecutivo. El prestatario, concluye la sentencia, tiene interés en la obtención de un préstamo -que no requeriría escritura pública-, y no en la constitución de una garantía real hipotecaria.

En lo que no considera la Justicia que existe una imposición, y por tanto no la ha anulado, es en la cláusula relativa al pago de los tributos relacionados con la constitución de la hipoteca, como el de Actos Jurídicos Documentados (AJD) o el de Transmisiones Patrimoniales (ITP). Lo hace en consonancia con la jurisprudencia de la Sala Tercera del Tribunal Supremo y la normativa legal y reglamentaria, que obliga al pago de dichas cantidades a estos.

Cómo recuperar los gastos de formalización de su hipoteca

office-1209640__180

El Tribunal Supremo, en la Sentencia de 23 de diciembre de 2015, ha declarado la abusividad de la cláusula contenida en los préstamos hipotecarios que imponía al comprador de la vivienda pagar todos los gastos, tanto los gastos de la compraventa como los gastos de la formalización de la hipoteca, ya que según dice dicha sentencia, la entidad bancaria debería haber pagado parte de los gastos que le correspondían, ya que la formalización de la hipoteca redunda en su beneficio. La sentencia 705/2015 de 23 de diciembre del Tribunal Supremo declaró abusiva la cláusula en la que el BBVA impone al prestatario el pago de todos los gastos, tributos y comisiones derivados del préstamo hipotecario y cuyo texto es el siguiente:

 

“ Son de cuenta exclusiva de la parte prestataria todos los tributos, comisiones y gastos ocasionados por la preparación, formalización subsanación tramitación de escrituras, modificación, incluyendo división segregación o cualquier cambio que suponga alteración de garantías y ejecución de este contrato, y por los pagos y reintegros derivados del mismo, así como por su constitución, conservación y cancelación de su garantía, siendo igualmente a su cargo las primas y demás gastos correspondientes al seguro de daños, que la parte prestataria se obliga a tener vigente…”

 

De forma parecida y en algunos casos idéntica, se encuentra redactada dicha clausula en casi la totalidad de los contratos de préstamo. Como afecta la nulidad declarada por el tribunal Supremo. Esto es así porque la nulidad declarada por el TS, lo es en base a la falta de concreción en el propio contrato del préstamo de los gastos comisiones y tributos, quedando establecidos de manera genérica.

 

Los gastos a los que se refiere son:

• Factura de la notaría correspondiente a la escritura de préstamo hipotecario.

• Factura del Registro de la Propiedad relativa a la inscripción de la hipoteca.

• El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (modelo 600) correspondientes a la escritura hipotecaria.

• Factura de la gestoría, en la que se recojan los gastos relativos a la escritura de préstamo hipotecario (si su intervención fue impuesta por el banco).

 

¿Quién puede reclamar? Los consumidores que tengan o hayan tenido un préstamo hipotecario.

 

¿Qué documentación se necesita para reclamar?

1. La escritura de préstamo hipotecario.

2. Últimos recibos del pago de la hipoteca.

3. Las facturas de los gastos Notariales y del Registro de la Propiedad.

4. Carta de pago del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD).

5. La factura de la gestoría.

 

Además de esta documentación se podría necesitar:

1. Posibles ampliaciones de la hipoteca, subrogación y novaciones.

2. Escritura de cancelación de la hipoteca (si estuviera cancelada y se tuviera dicho documento).

 

¿Cómo trabajamos?

Previo al inicio de la reclamación judicial, presentamos una reclamación ante la entidad bancaria SERVICIO DE ATENCION AL CLIENTE del banco correspondiente, instando la nulidad de la cláusula y la devolución de las cantidades indebidamente abonadas.

 

De no contestar en el plazo de dos meses, o no ofrecer el banco una solución satisfactoria a los intereses del cliente se interpone la correspondiente demanda judicial. No obstante, le recomendamos que se ponga en contacto con nuestro despacho, y nos remita copia de la documentación anteriormente citada, para que podamos examinar su caso con detalle, y así comprobar que su escritura de préstamo hipotecario contiene una cláusula sobre los gastos y a quién corresponde el pago de los mismos.